Por Reynaldo Hernández Rosa
Llegaron a tiempo, todos a bordo de sus flamantes jeeppetas de último modelo, convencidos de que ocuparían las principales páginas de los diarios nacionales, dado que la mayoría de la insulsa prensa deportiva están en la nómina que estos dilapidan.
Al recibimiento del campeón mundial de los pesos mosca, Eliot Rojas, a su comunidad natal Villa Riva, en la provincia Duarte, no podía faltar el figurero mayor del gabinete presidencial, el espectacular Jay Payano.
Payano, cuya agenda siempre repleta de actividades sociales y camaderías con los cronistas deportivos, el cual de seguro no conoce de las deficiencias deportivas en toda la región, empero, llegó raudo y veloz a buscar su pasión y norte en la secretaría que ocupa: cámaras y allante…..
Pero no sólo el Jay, llegaron los inoperantes e infuncionales funcionarios regionales, los cuales tampoco hacen nada por las instalaciones del músculo y la mente, pese a que recorren la provincia sólo cuando las cámaras de televisión y los flahs estén para captar sus bovinos rostros escatológicos.
La comunidad de Villa Riva y sus zonas aledañas se fusionaron para reconocer al pugilista por su hazaña en playa extranjera, a sabiendas, que dicho logro no obedeció a los esfuerzos de los vocingleros del área deportiva, todos, incluyendo a los bonitillos del Comité Olímpico Dominicano.
La soflamería de los gastados servidores gubernamentales en la zona, llena de carpantas del mal agüero, deslució el cálido recibimiento de Elio Rojas, donde residentes de los municipios de Pimentel, Castillo , Hostos se agolparon para estrechar la mano del nuevo campeón, empero, los buscas cámaras oficiales hicieron del festivo acto una actividad de ellos…… Lacras insulsas.
Los ¨empleados¨ periodistas de la gobernadora provincial, el senador, el diputado de la circunscripción número dos así como el inefable secretario de Deportes demostraron que al menos la crónica deportiva de la región está en sus bolsillos, si tomamos en cuenta que todas las ¨¨historias¨¨ versaron sobre la comitiva de recibimiento no de la loable hazaña obtenida.
No obstante, la mayoría de los citados deploraron el espacio buscados por los ineficientes funcionarios provinciales, siempre prestos a posar para sus adulócratas del cartel periodístico de la provincia. Estamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario